Él, el primero en abrir su corazón. Rebelde, sencillo. Con el vivió momentos inolvidables, él también la quiso. Pero luego desapareció. Anteponía sus intereses a su corazón, a ella. Valiente, descarado, impulsivo. Él.
Él. Altivo, serio. El deber es lo primero, y nada ni nadie puede interponerse. Poco a poco se va abriendo, y sorprendiéndola. Rompe las normas por ella, cosa que antes de conocerla, nunca se le habría ocurrido hacer. La quiere. Él.
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Y ella, que al fin y al cabo es la que tiene que escoger; duda entre seguir viviendo en la esperanza, o hacer realidad un sueño. Un único problema: los dos se llaman igual.
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(No, no voy a hacer una analogía de todos los personajes de las películas de Disney; tan sólo que Pocahontas y yo... somos practicamente iguales. Y me gusta expresar mi situación así, al fin y al cabo... la historia es la misma.)
5 comentarios:
en cuanto he visto la imagen me ha dado algo.. me encanta pocahontas y nada, recuerda lo que decía la abuela sauce.. algo así como: escucha a tu corazón, n?
Un beso y me ha requetencantado la analogía!
Bueno, si al menos él la quiere.. supongo que es lo importante. No? :)
Que los dos se llamen igual no es un problema. :P Yo creo que el segundo es mejor, está dispuesto a más por ti.
opcion dos sin duda!
Pocahontas siempre fue la única princesa de Disney que menos me gusta porqué és la única princesa de Disney que tiene dos novios entre su primera película y su segunda película(John Smith y John Rolfe)...
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